domingo, 21 de septiembre de 2014

... llegó la hora

Sí, llegó la hora de agradecer a una persona todo lo que ha supuesto en mi vida desde que me reencontré con ella..

Pero empezaré por el principio. Muchas veces, en la vida, nos cruzamos con todo tipo de personas,  buenas y malas, que nos aportan algo y aprendemos de ellas. En mi caso, la primera vez que te vi, al principio,  he de reconocer que no me imaginaría lo que posteriormente significarías para mí.

Aquella primera etapa duró muy poco, y, he de reconocer, que cuando saliste de mi vida, noté un vacío grande, y no es porque pensara en ti todos los días o que estuviera distinto a otras veces,  más que nada era la sensación de haber perdido a alguien con el que podría decir que encajaba, me sentía identificado con su forma de ser y que, de un modo u otro no quería perder.

Fue la primera vez en mi vida que sentí soledad y, puedo asegurar que es una sensación bastante desagradable.  Exteriormente no lo demostraba, pero por  dentro tenia un vacío, un hueco que no puedes explicar, porque ni tú mismo sabes por qué lo tienes.

Pasaron los años,  y parecía haberlo olvidado, pero la mente humana siempre nos sorprende con una de las suyas. Un buen día, buscando en las tan odiadas para algunos redes sociales,  en esas sugerencias que ciertos programas ofrecen apareció tu nombre... ¿casualidad? No lo creo, en el entramado de redes sociales, a veces está la respuesta a muchas de nuestras preguntas. En mi caso, así fue.

No recuerdo los primeros días o cómo llegamos a ser amigos, pero lo que sí recuerdo es que de ahí salió una amistad sincera, sin tapujos, sentada en el día a día, yo te contaba mis problemas y tú me contabas los míos. Poco a poco empecé a confiar en tí y tú en mí, descubrimos que teníamos bastantes cosas en común lo que nos hizo cimentar nuestra amistad de una forma muy profunda. Te estoy muy agradecido por hacerme ver que la auténtica amistad existe y es un orgullo para mí poder confiar en ti plenamente, contarte cada día mis cosas escuchar las tuyas, ofrecerte mi apoyo en los momentos difíciles así como tú me ofreces el tuyo cuando lo necesito.  Contigo he aprendido lo que es la auténtica amistad, y cada día me levanto sabiendo que puedo contar contigo como amiga y saber que vas a estar ahí siempre que lo necesite.

Siempre me dices que yo soy un pilar para ti,  pero sabes de sobra que el auténtico apoyo eres tú. Hasta ahora no he tenido el valor de decirte todo esto y te pido perdón por no haberlo hecho antes, pero no he tenido ni el tiempo ni las palabras apropiadas para agradecerte todo lo que haces por mí cada día cada hora y cada minuto. También decirte que eres muy valiente y que siempre cada día me sacas una sonrisa cada hora me haces pensar en que hay personas por las que vale la pena jugarse el todo por el todo, porque sé de sobra que ellos lo harían por ti también.

Nunca tendré suficientes líneas para agradecerte lo que significas en mi vida, el saber que siempre estás ahí, escuchándome, significa muchísimo, de todas las personas que he conocido en mi vida, y te aseguro que son muchas, tú eres de la que más orgullosa me siento, porque como tú hay pocas personas y tú cada día me demuestras qué no estoy equivocado. Puede que pensemos parecido que tengamos los mismos puntos de vista, pero ten por seguro qué me has dado más de lo que yo pueda darte alguna vez.
Sólo queda terminar este post diciendo que ojalá dure para siempre y que por mi parte siempre tendrás un hueco en mi vida, así como en mi corazón. 

Gracias Violeta.

viernes, 25 de abril de 2014

Se ha ido un hombre bueno

La verdad es que hoy, no era mi intención escribir sobre nada en particular, pero la noticia de la muerte de Tito Vilanova, ex – entrenador del F.C. Barcelona, me ha dejado consternado.

Las rivalidades quedan ahora en un segundo plano, y desde aquí quiero brindar mi humilde homenaje a un hombre que, desde mi punto de vista, ha cambiado la forma de entender el fútbol.
Creo que era un tipo excepcional, con carisma, y uno de los mejores entrenadores que ha tenido este deporte, pero, sobre todo, quiero resaltar su forma de ser,  o, al menos, la impresión que personalmente tengo de Tito.

Una persona que hacía su trabajo siempre de forma discreta,  sin hacer ruido. Era un hombre reservado, pero, el destino, le tenía reservado una última batalla, batalla en la que ha luchado con uñas y dientes, y de la que desgraciadamente no ha podido ganar, pero Tito, ten por sabido, que para mí, personalmente, has sido un ejemplo de superación y saber estar, un ejemplo para el deporte y un ejemplo de vida en general.

Tu muerte no ha sido en vano, porque has hecho mucho por este deporte, entre otras cosas, has sido el forjador de uno de los mejores equipos de la historia del fútbol.

Tu ejemplo de dedicación espero que sea seguido por las escuelas de entrenadores, ya que has dado mucho al mundo del deporte, entre otras cosas, ilusión, que la gente vuelva a ilusionarse por ver fútbol, por ver espectáculo, seas del equipo que seas.

También tu comportamiento fuera de los terrenos de juego ha sido ejemplar. Siempre has respetado al contrario, sin entrar en provocaciones y eso te honra. Como espectador y amante del deporte me siento orgulloso de que en este país  haya  habido personas como tú, que hayan dado al mundo del fútbol una dimensión hasta ahora desconocida.

No me olvido tampoco, de las oportunidades que has dado a tantos y tantos canteranos, que ahora se están labrando un nombre bien sea en el Barcelona o en otros clubes, tú has sabido abrirles las puertas que otros cierran, tú has sido ese tren que han estado esperando, tú has tenido la fe, que otros no han tenido, de sacarles al campo y darles ese empujón que necesitaban para poder despegar.

Con Tito se ha ido, no sólo un genio del fútbol, también se nos va un amigo, un técnico, pero ante todo, un caballero de los pies a la cabeza. Estés  donde estés, descansa en paz, y si puedes leer estas líneas, agradecerte de todo corazón la lección de vida que nos has dado a todos, agradecerte tu entereza y tu deportividad,  ten por seguro Tito, que te vas dejando muchos amigos en todas partes, yo no he tenido el placer de conocerte, pero seguro que habría sido un honor y un privilegio.

Por último, sólo queda decir una cosa, Tito, tu legado permanecerá por siempre y como dice  Tolstoi “La muerte no es más que un cambio de misión” y la tuya aquí, la has cumplido con creces.

Firmado:

-          Un madridista –

miércoles, 23 de abril de 2014

Por qué leer un libro…

Hoy no quería dejar escapar la oportunidad de escribir algo en este día tan señalado como es el día del libro.

Para todos aquéllos  que no sepáis por qué se celebra el día 23 de abril, ahí va la explicación.

Supongo que estaréis de acuerdo conmigo en que dos de los escritores más grandes de la literatura universal han sido el español Miguel de Cervantes Saavedra y el inglés William Shakespeare. Pues bien, a pesar de ser dos escritores bastante diferentes, no sólo por las lenguas en las que escribían, les une un hecho en común, ambos murieron tal día como hoy, un 23 de abril de 1616, la verdad hay ciertas discrepancias respecto a la fecha de la muerte de ambos, pero, históricamente, se ha considerado esta fecha por la proximidad con la que las dos muertes se produjeron.

Bien, dicha la explicación de por qué se celebra tal día como hoy,  el día del libro no es sólo un homenaje a estos dos grandísimos escritores, es un homenaje a la literatura en general, a la lectura, a los sentimientos que te produce el leer un libro, a la pena, a la alegría, al miedo, a todo lo que un libro te hace sentir, pero sobre todo, se rinde homenaje al trabajo de los autores, al esfuerzo por hacer mejores historias, llegar a sus lectores y a la dedicación empleada en escribir cada obra, la elección de las palabras adecuadas, las frases, cómo dar esa vuelta de tuerca a la trama para que el lector se termine de enganchar a la novela o se sorprenda, enoje o hasta llore.

Como veis, os estoy dando más de una razón para que empecéis a leer un libro, aunque, creo que gran parte debe salir de uno mismo.

Los avances en la tecnología, nos han facilitado la lectura hasta tal punto, que podemos adquirir prácticamente cualquier libro que se haya publicado. A mí, personalmente, me gusta leer los libros en papel, no sé si es por nostalgia o costumbre, pero también, he de reconocer que los libros electrónicos son un gran avance, es más, yo también los utilizo y no me arrepiento de ello.

Hoy en día, tenemos  medios de todo tipo para leer un libro, desde el papel hasta los e-books  y tabletas, pero, hoy quiero recordar, y más en este día, a las bibliotecas, que siempre han estado y estarán ahí, fomentando la cultura, y sobre todo, ayuda a aquellas personas que no disponen de un lugar donde poder estudiar con tranquilidad.   

Muchas veces, no nos damos cuenta de que, cuando una biblioteca cierra, muchas personas pierden un lugar donde formarse, divertirse, aprender o relajarse.  Y por si no lo saben, las bibliotecas, tienen que gastarse todo el dinero asignado durante año porque al siguiente, le descontarán del presupuesto todo el dinero sobrante. No me gusta dar este tipo de datos, pero he creído necesario hacerlo, para alejar la falsa creencia de que las bibliotecas despilfarran el dinero, algo que no es así, en absoluto, ya que todos los gastos tienen que estar justificados hasta el más mínimo detalle.

Después de este largo paréntesis, sólo queda decir que tengáis un feliz día del libro, que sigamos usando las bibliotecas, ya que son de todos y para todos y como dice un viejo eslogan “Leer te da más”.

martes, 22 de abril de 2014

Sentimientos a la luz del flexo

Cada hombre es dueño de su propio destino. Bonita frase, pero, para mí, se queda sólo en eso, una frase. 

De niño, en la escuela, siempre me decían hasta la saciedad: “estudia, y te harás un hombre de provecho” y no les faltaba razón, pero hoy en día, tengo la extraña sensación de que los que realmente triunfan son los aprovechados.  Sí amigos, no voy a ser yo quien haga una apología del descaro y la desvergüenza, pero, pónganse a mirar y se preguntarán: “¿Y para eso me mato yo ocho horas  trabajando?”…

La sociedad cambia así como las costumbres y los códigos éticos, pero, en la opinión de un servidor, esto ya es demasiado. No es admisible que un pobre trabajador esté diez horas para llevar algo de comida a su casa y que otras personas de sobra conocidas se ganen el pan yendo a platós de televisión si bien haciendo otras cosas que no voy a mencionar aquí.

Hemos dejado la dignidad humana a la altura del betún, la moral no existe y la conciencia es un raro don que sólo ostentan unos  pocos. El todo vale para ganar es la forma de vida de muchos poderosos, pero, ¿qué hay de nosotros, simples ciudadanos? ¿Tenemos moral? ¿Nos queda algo de pudor o dignidad? Que cada uno se responda a sí mismo.

Desde mi propia experiencia, lamentablemente, me veo como una persona a la que poco a poco ha ido insensibilizándose, ¿no creen que es muy triste que ante una tragedia como la de un terremoto un tsunami o similares permanecemos impasibles delante del televisor y no seamos conscientes de la gravedad del asunto?

Nuestro nivel de abstracción es tal que debido a la masificación de este tipo de noticias, nuestro cerebro simplemente las acepta como normales, y como siempre, la eterna pregunta, ¿Quién está detrás de todo esto? No me pidan una respuesta, para muchos, los gobiernos, para otros, sociedades secretas llámense masones, rosacruces o el famoso club Bilderberg, opción bastante aceptada por otra parte, pasando por multinacionales o grandes sectas.

Para conseguir un puesto de trabajo, se ha de luchar encarnizadamente con otros candidatos, no hay reglas, ni honor, todo vale, ¿Acaso es  esto lo que nuestros hijos van a heredar? Todavía estamos a tiempo para poner un poco de cordura y de arreglar un poco todo esto.

La razón de escribir este artículo es simplemente porque no podía aguantarme más sin decir lo que pensaba, no sé si estaré equivocado o tendré razón en todo, ya no me importa, son muchos los años que vas viendo y viendo y viendo cosas que no encajan en este sistema,  también sé que no soy el primero, ni seré el último en escribir este tipo de epístolas, pero, si de verdad queréis quedaros a gusto, os invito a hacerlo, ya que, en mi caso ha sido una liberación.

Para finalizar, espero que estemos  ante el final del túnel y que las aguas vuelvan a su cauce como antes, pero, den por sentado que nos vamos a enfrentar, nos guste o no, a un nuevo modelo de sociedad, donde todo lo anterior, posiblemente, quede en un segundo plano y sólo el tiempo nos dirá si ese modelo será mejor o peor que el actual, el tiempo dictará sentencia.  

lunes, 21 de abril de 2014

“Es de bien nacido ser agradecido”

Hoy he vuelto la vista a atrás y me he acordado de una de tantas historias que sucedieron durante la guerra civil. Ésta no es de tiros, ni tampoco es la típica batalla con heroicidades que normalmente se cuenta.

La historia de este post, sucedió en uno de tantos  pueblos, una vez ya  finalizada la guerra civil, y cuando el hambre y las enfermedades eran algo demasiado corriente, y sólo unos pocos podían permitirse el lujo de comer caliente todos los días.

Bien es sabido que después de la guerra muchísimas personas fueron perseguidas por luchar bajo la bandera republicana, ya no por sus ideas, sino por la propia localización geográfica. Pero no quisiera desviarme del tema así que procedo a relatar lo sucedido.

Era una noche cerrada de invierno de finales del año 1939, y el protagonista de esta historia y sus hermanas, estaban en su casa dispuestos  a irse a la cama, cuando, de repente, escucharon varios golpes muy fuertes en la puerta. Él, se levantó y fue a abrir, no sin miedo por otra parte, ya que no se sabía la clase de gente que podría aparecer por aquel entonces.

Al abrir la puerta se encontró a un hombre, sudoroso y asustado, pidiéndole que por favor le dejara entrar en su casa, porque le estaban buscando para ajusticiarlo, presuntamente, por motivos políticos. El aldeano, sabiendo lo que era eso, y después de haber luchado en una  guerra, aunque “sólo” de panadero, lo acogió en su casa sin preguntar y lo ocultó durante varios días hasta que pasase todo.Bien es cierto que por aquél entonces, se estaba jugando el cuello, ya que más de dos y tres veces, la guardia civil preguntó por el paradero de este fugitivo y la respuesta siempre fue la misma: “No sabemos quién es”.

Durante ese tiempo, la familia se volcó con este hombre, sin conocerlo de nada, le dieron comida, bebida, y sobre todo un techo, de manera altruista y desinteresada hasta que, finalmente, pudo marcharse y seguir su camino, a donde quiera que fuera.Pasaron los años, y, como es lógico, la historia fue olvidada, pero, como siempre digo, las cosas siempre ocurren por alguna razón y, he aquí lo que sucedió.

Una mañana, nuestro protagonista, estaba en el mercado del pueblo con un caballo, repartiendo pan, como de costumbre, cuando, desafortunadamente, se le escapó el caballo y destrozó algunos objetos de un puesto. El tendero salió hecho una furia y casi se enzarzan en una pelea, cuando, apareció un hombre, que parecía ser bastante importante, que le dijo al tendero, “si toca a este hombre, le mato”.

Nuestro buen amigo se quedó atónito por las palabras, y le preguntó quién era, a lo que el hombre  contestó: 

“Veo que no se acuerda de mí, pues yo sí que me acuerdo de usted. Yo fui el que acogió en su casa cuando me perseguían” y después de una breve conversación, desapareció, y no volvió a verle nunca más, pero, seguramente, dejándolo con una gran satisfacción, al ver que su buena acción había tenido recompensa, y es que, amigos, nunca se sabe cuándo nos devolverán un favor, de ahí el dicho “Es de bien nacido ser agradecido”.     

lunes, 14 de abril de 2014

Tecnología si pero….

Cada cinco minutos la tele alimenta nuestra vista con nuevos artículos como, tabletas, smartphones, reproductores DVD etc.

Los tiempos de mejora de los productos cada vez son más cortos, lejos quedan allá los años en los que se compraba cualquier teléfono y no lo se cambiaba hasta pasados cinco años como mínimo.
Y es que, no nos engañemos, esta estrategia, funciona a las mil maravillas y lo peor de todo, es que, no nos queremos dar cuenta de ello. Es tal la campaña consumista que se está haciendo por parte de las grandes multinacionales, que con tal de obtener beneficios a cualquier precio, han sabido darle la vuelta a la tortilla, y lo que, a priori, servía para hacer llamadas, ahora, prácticamente, dicha función ha caído en desuso.

Pero vayamos  más allá del puro negocio, hay un trasfondo más oscuro y preocupante detrás del uso que le damos a estos  pequeños aparatos. Como todos sabemos, todos estos dispositivos cuentan con GPS para poder ser localizados, pero de lo que no estoy tan seguro es  que se le dé un uso correcto, allá cada uno.

Las Smart Tv o televisores inteligentes, son un buen negocio, te lo dan todo hecho, no necesitas salir de casa para prácticamente nada, la comodidad y el confort a tu alcance, pero, recuerde, que con ella accedemos a la red y, si me permite un consejo, cuando nos metemos en la red, cuidado, porque, a lo mejor, es posible que aparte de darnos servicios, nos estén quitando privacidad, datos, gustos, aficiones, preferencias personales, que pueden ser utilizados por terceras personas.

Con el correo electrónico, la situación, es más o menos similar. Prueben a mirar una serie de páginas aleatorias durante un par de semanas y apunten en un papel el tipo de información que contienen, viajes, ocio, incluso sexo, no importa la temática. Al cabo de un tiempo revisen su lista de correo no deseado o spam y miren el título de esos correos, me atrevo a decir que el 90 % de los mismos estarán relacionados con la temática o temáticas de esas páginas visitadas que han apuntado en el papel. Con esto, no quiero ser alarmista, pero simplemente, dar una serie de pinceladas sobre qué es lo que hay actualmente, y si esto se consigue solo a través de los datos de navegación, que no se hará con la información personal que colgamos en la red.


Por último y parafraseando a Hobbes y su célebre frase “Homo homini lupus”, el hombre es un lobo para el hombre, quizá deberíamos cambiarla por esta otra “Internet homini lupus”, les invito a reflexionar y a sacar sus propias conclusiones, seguramente, algunas serán bastante sorprendentes y puede que cambien el punto de vista sobre este tipo de tecnologías.